Para resolver el problema de algunos conductores que no respetan la prioridad en los cruces y tampoco ceden el paso a los viandantes, un policía en San Francisco,Estados Unidos, ha decidido dejar la tecnología a un lado y utilizar un disfraz de lo más peculiar para tomar cartas en el asunto.
Esta curiosa iniciativa tiene como escenario principal los propios pasos de peatones. Como podemos ver en las imágenes, el policía va disfrazado de pollo y se pone en el extremo del paso de cebra a la espera de ver si los coches que pasan a gran velocidad paran. De este modo, los conductores que no frenan no tienen excusas y es que el disfraz es tan llamativo que se ve a kilómetros.