El politólogo Pablo Simón prefiere aún no dar un pronóstico sobre lo que pasará en las próximas elecciones gallegas que se celebran el 18 de febrero. "Aún es pronto para saber exactamente el impacto que puede tener la crisis medioambiental del vertido de pellets".

"Las tendencias estructuras parecen estar claras, pero hasta que no estemos más cerca de la campaña electoral no me pronunciaría", sostiene Simón. Afirma no obstante que parece haber en la actualidad "una cierta calma chica en el plano preelectoral gallego".

El PP está algo más débil, el BNG algo más fuerte y el PSG estable. Por debajo, no sabemos qué ocurría si Sumar, Podemos o Democracia Ourensana arrastrarán para poder conseguir algún diputado. "Vamos a esperar, porque además normalmente, las elecciones gallegas al hacerse por separado suele tener una participación más baja y eso suele beneficar al partido que están en el gobierno", explica Simón.