En San Isidro, reeditamos los himnos para la Champions. Porque la fiesta del Santo es el encuentro de las aficiones más chulas. El traje típico de chulapa es rojiblanco. También los claveles de las mocitas madrileñas.

Y hasta el mantón, si apuran. Dicen que el auténtico chulapo es “de los dos equipos”. Hace doce años que se ganó el mote: doce años de la Novena de Zidane y de los paradones de un Santo que salió a 20 minutos del final.

Usemos el oráculo del barquillero, ¿quién se llevará la Décima? Por ahora, ni madridistas ni atléticos, en San Isidro: madrileños.