A las colas de rebajas se suma la de quienes quedaron descontentos con los Reyes Magos. Llegan a las tiendas cargados de bolsas para devolver o cambiar de talla. Han madrugado mucho para conseguir esa talla deseada pero se quejan que ya no queda nada. Luego viene otra lucha, la de los tickets, los tickets regalos y esos bonos que llenan nuestras carteras para que los gastemos otro día. 

A muchos los Reyes Magos les ha traído un problema al ver que la talla no es la suya y que deben sufrir largas colas para efectuar el cambio. "Me han regalado unos pantalones pero los reyes se creen que estamos más buenos de lo que estamos", ha señalado uno de los compradores.

Calles a rebosar, y parkings de centros comerciales llenos desde primerísima hora de la mañana. Y de esta forma. empieza la guerra por los ticketes, por las tallas y la guerra de las colas. Pero,  mientras los compradores llenan tiendas y pasillos, los acompañantes, en su mayoría hombres, llenan los bancos y sujetan las columnas. "Mi madre y mim hija están dentro y prefiero mirar el móvil" ha explicado uno de los 'afectados'.

Hoy nada les puede retener en casa y sobre todo a aquellos a los que la suerte les ha sonreido. "Me han tocado 120 euros y me los voy a gastar en rebajas", comenta una de las afortunadas.

Empieza la cuesta de enero.