En el día a día de toda persona, la mascarilla se ha convertido en compañera indispensable y necesaria para evitar nuevos contagios por coronavirus. El vehículo privado es un espacio que ha suscitado muchas dudas respecto al uso que debemos darle a este protector facial.

En primer lugar, ha de quedar claro que la mascarilla no es de uso obligatorio únicamente bajo dos supuestos: viajar solo o con la persona o personas con las que se convive. Si viajas con gente con la que no convives, deberás llevar mascarilla. ¿Y si no la llevas y la quieres guardar? Pues bien, no vale cualquier sitio.

En estas fechas, se puede ver a muchos conductores colgar la mascarilla en el retrovisor interior de sus vehículos. Mirando el Reglamento General de Circulación, concretamente su Artículo 18, vemos que el conductor debe “mantener el campo de necesario de visión”, algo que con la mascarilla colgada no se cumple.

Pues bien, esta infracción puede suponer una multa de 80 euros. En el caso de no cumplir con las limitaciones anteriormente mencionadas, referidas al uso de mascarilla con personas con las que no se habite en el vehículo, la multa puede llegar a los 100 euros.

¿Y dónde debo guardar entonces la mascarilla? Deberemos tener una bolsa de tela o de papel para guardarlas y evitar así que se contaminen. Antes de guardarla, es importante recordar que debes desinfectarte las manos con gel hidroalcohólico.

Las mascarillas, siempre homologadas

Cabe recordar que no todas las mascarillas son válidas, ni dentro ni fuera del coche. Únicamente hay que utilizar aquellas que están homologadas, como asegura Deborah García Bello en 'Más Vale Tarde'.

La química y divulgadora científica afirma que es importante "no usar tejidos de algodón", algo que no supone "ningún obstáculo" para el coronavirus.

"Hay gente que todavía no es consciente del uso de las mascarillas homologadas, ya sean quirúrgicas o higiénicas, porque hay diferentes partículas que emitimos", añade.