Esta clase podría ser de la escuela de magia y hechicería de Harry Potter. Sin embargo, no estos alumnos no están matriculados en Hogwarts, sino en la primera universidad de ilusionismo del mundo.

Para llegar a ser unos verdaderos magos, los alumnos aprenden materias teóricas, pero sobre todo prácticas. La primera lección que deben de aprender es a no contar cuál es el truco, por eso, antes de empezar hacen el juramento hipocrático.

Los responsables del título aseguran que es una forma segura de encontrar trabajo. Afirman que los empresarios hosteleros buscan cada vez más este tipo de perfil.

Este centro universitario se ha convertido ya en el punto de referencia en la búsqueda de ilusionistas profesionales. Porque a veces un empleo puede aparecer por arte de magia