Un directivo argentino ha acabado presentando su dimisión y pidiendo perdón tras filtrarse un vídeo sexual con una trabajadora de su oficina. La grabación se ha convertido en viral y ha hecho que la noticia se convierta en todo un escándalo en el país.

En su carta de dimisión, según informa el medio lacapitalmdp.com, el directivo, un hombre de 63 años, expresa sus "sinceras disculpas por lo acontecido" a su esposa, hijos y nietos. Además, defiende su gestión: "Quiero destacar que no toqué un peso que no fuera mío [...] trabajé, antes y ahora, mucho para que nuestra institución pudiera mejorar".

Asimismo, el hombre insiste en que lo ocurrido forma parte de una campaña para conseguir su caída laboral: "A estos cobardes les digo que no tuvieron los huevos de enfrentarme personalmente. Prefirieron, como siempre, la cobardía de desgastarme y hostigar a mi familia".