Un hombre de 72 años ha sido detenido tras confesar a la Guardia Civil que había matado a su esposa cuyo cadáver ha sido encontrado con un hachazo. El suceso ha ocurrido en el número 1 de la calle Alberto Sols del municipio de Armilla, limítrofe con Granada capital.

Según la Guardia Civil, después de cometer presuntamente el crimen el hombre llamó por teléfono al cuartel para confesar que había matado a su mujer y que tenía intención de suicidarse, pero pudo ser detenido por los agentes que se personaron en el domicilio.