Aunque la orden venga de arriba Rita Barberá no piensa marcharse, es lo que publica el diario 'El Levante'. Una actitud desafiante frente a Rajoy que, aseguran, también mantiene con la presidenta del PP valenciano. A la que Rita, tras estallar el escándalo, preguntó por Whatsapp, con tono provocador, que de qué quería que diera explicaciones.

Isabel Bonig no ha querido confirmar ni desmentir, y tampoco lo ha hecho su número dos porque dice "son conversaciones privadas". Pero parece evidente que el PP de Valencia ya no la quiere en sus fotos. Un gesto, por ejemplo, es que decidieron no oponerse a que Barberá comparezca en las cortes valencianas para responder a las preguntas del resto de grupos.

Todos al unísono los grupos piden a los populares contundencia, frente a una Rita rebelde que se aferra a su acta a prueba de imputaciones. Además la trama de Alfonso Rus también salpica a tres altos cargos del PSOE valenciano, Esquerra Unida, y Compromís, que han sido citados como investigados, una de ellas es la diputada que denunció el caso.

Pero sobre esto Bonig sí que ha querido hablar y ha dicho que "la corrupción es un cáncer que nos está matando a todos" y ha añadido, quien esté libre de pecado, que tire la primer piedra.