Mariano Rajoy no descarta reformar la Constitución si vuelve a ganar las elecciones: "Cada legislatura tiene sus prioridades y este era la de evitar la quiebra de España. En la próxima legislatura habrá que hacer otras cosas. Yo no me niego a hablar de una reforma de la constitución".

Ha adelantado que podrían modificar el reparto de competencias entre Estado y Comunidades Autónomas, pero advierte que los cambios no van a satisfacer a los soberanistas: "No se van a quedar contentos los independentistas catalanes con la reforma de la Constitución española que se pueda hacer en las cortes porque lo que quieren ellos es la liquidación de la soberanía nacional".

Y, aclara, aunque los soberanistas ganen los comicios catalanes, no podrán hacer una declaración unilateral de independencia: "Con un voto más no se puede iniciar ningún proceso a ninguna parte porque no es posible ya que no tienen capacidad para decidir sobre ese asunto. No tienen capacidad para decidir sobre ese asunto porque lo que sea España lo tienen que decidir todos los españoles".

La coalición 'Junts pel sí' considera que el Gobierno buscaría con esta reforma quitar competencias a las autonomías, pero desde el PP catalán lo niegan. El presidente asegura que "el debate no es tanto si significa una pérdida de competencias. La reflexión tiene que ir en la línea de cómo hacer que los servicios transferidos sean más eficientes”.

El PSOE cree que el nuevo gesto de Rajoy es una estrategia electoral: "Mariano Rajoy ha propuesto una artimaña electoralista para arañar votos". Los socialistas recuerdan que toda la oposición ha propuesto cambiar la Carta Magna y que si no se ha hecho es porque Rajoy no lo ha permitido.