La Guardia Civil desmantela en Pontevedra una "red de carreras ilegales" en polígonos industriales

Los polígonos industriales de la provincia de Pontevedra se han convertido en los últimos meses en el escenario de decenas de concentraciones de vehículos organizadas por una "red de carreras ilegales". Tras realizar diferentes operativos de control durante los fines de semana por un gran incremento de la participación en estos eventos y denuncias posteriores, la Guardia Civil ha logrado desmantelar la agrupación que las estructuraba.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, ha asegurado este viernes en la junta de coordinación que han recibido numerosas quejas de diferentes municipios pontevedreses, sobre todo de las zonas cercanas al polígono de O Campiño-A Reigosa, uno de los lugares más afectados de la provincia. Asimismo, ha destacado la actuación de la Guardia Civil y del Subsector de Tráfico en la operación 'Platillo'. En esta reunión también han participado, entre otros, el capitán Antonio Piteira, el sargento primero, Jorge García, la jefa provincial de Tráfico, Paula Yubero y el alcalde de la localidad Puentecaldelas, Andrés Díaz Sobral.

Las autoridades sostienen que el operativo ha contado con "un número importante de agentes" y que usaron medios técnicos como drones o radares para probar "infracciones administrativas al volante". Además de las imágenes, la Guardia Civil cuenta con 96 denuncias por conducción temeraria, por exceso de velocidad o por conducir bajo los efectos de las drogas o el alcohol. Sin embargo, inciden en que este "no es un hecho aislado" y que más zonas han compartido su descontento con "este tipo de quedadas" que "han causado daños en polígonos" y que "han creado situaciones de auténtico peligro", por lo que el operativo seguirá activo en los próximos fines de semana.

Con todo, la Benemérita ha informado de que la mayoría de los conductores e investigados son jóvenes que utilizan vehículos antiguos y que no tienen una gran experiencia de conducción. Es por ello que recuerdan la gravedad de estas "quedadas", las cuales pueden provocar accidentes, colisiones con otros turismos o el atropello de viandantes.

Muchos de ellos, ya identificados, han sido sancionados con multas y la pérdida de puntos en el carnet de conducir por suponer un peligro para la seguridad vial y por ponen peligro sus vidas y la de otros muchos asistentes por comportamientos temerarios.