Paéz ha estado declarando durante algo más de dos horas ante el juez Pablo Ruz, entre las 11.15 horas y las 13.25, lo que ha retrasado sustancialmente los interrogatorios como testigos a los ex secretarios generales del PP Javier Arenas y Francisco Álvarez-Cascos, aunque este último ha entrado ya a declarar a las 13.30 horas.

Durante su extensa declaración, Paéz ha reconocido las dos anotaciones en las que el figura como beneficiario de un total de 12.000 euros y que aparecen en los papeles del extesorero con la supuesta caja B del PP.

Según la declaración que prestó Bárcenas el pasado 15 de julio, Paéz llegó a tener en sus manos durante cuatro meses la carpeta con la documentación de la supuesta caja B porque al estallar el caso Gürtel en 2009 se temió que hubiera un registro en la sede del PP.

Páez, que ya no está vinculado al PP, permaneció un año en la gerencia del partido (de 2009 a 2010) y la abandonó al ser sustituido por el actual presidente del Consejo de Estado José Manuel Romay Becaría.

El retraso que llevan las declaraciones ha hecho coincidir en los pasillos de la Audiencia Nacional a Álvarez-Cascos y al también ex secretario general del PP Javier Arenas, por lo que ambos se han saludado, aunque han esperado en salas distintas su turno para comparecer ante Ruz.

Cascos había sido citado a las 11.30 horas y Arenas a las 12.30 horas, pero la media hora de retraso con la que han empezado los interrogatorios -el primero el del empleado de caja del PP Antonio Ortiz que se ha prolongado casi una hora- y las dos horas de declaración de Páez ha provocado ese encuentro de los dos ex secretarios generales.

Tanto Arenas como Álvarez-Cascos han sido recibidos a su llegada a la Audiencia Nacional con gritos, abucheos e insultos de "chorizo", "ladrón" o "corrupto" por un grupos de una veintena de afectados por las preferentes y yayoflautas que permanecen desde esta mañana apostados frente a la sede del tribunal.