Ana Mato convocó a la prensa pero, por la mañana, la embajada de España en la ONU avisó por cortesía a los correponsales de que la ministra no aceptaría preguntas.
Los periodistas reaccionaron, principalmente a través de sus cuentas en Twitter, y de forma espontánea prepararon un plantón: "Sin preguntas no hay cobertura".
La movilización sensibilizó a la ministra, y su equipo avisó, sólo media hora antes de la comparecencia, de que al final sí se iban a aceptar preguntas.