Organizaciones del sector agrario se han movilizado este miércoles frente al Ministerio de Agricultura para reclamar mejoras significativas en su campo "frente a los altos costes para la producción" que sufren actualmente, entre otros problemas. Ante la sede del departamento que encabeza Luis Planas, Asaja, UPA Andalucía y COAG, entre otros, han esgrimido una serie de demandas ante la difícil situación por la que están pasando actualmente los trabajadores.

Especialmente, por ese alto precio de la cadena productiva, una cuestión que luego se traduce, como han denunciado, en una reducción de los beneficios para ellos y en el incremento del coste del producto que acaban pagando los consumidores. "Llevamos muchos años sufriendo padeciendo una situación de indefensión", ha expuesto a laSexta Andrés Góngora, responsable del departamento de frutas y hortalizas de COAG, que ha explicado que "el no tener precios justos" les lleva a un nivel de "endeudamiento que no para de crecer" en las explotaciones.

"Se nos han caído por el camino bastantes agricultores que no pueden seguir. Mucho nos tememos que, o se toman soluciones ya por parte del Ministerio, o desgraciadamente la presión que ejercen los supermercados con el precio continuará", ha advertido Góngora, ahondando en esta cuestión: "Más este año, aumentando los costes de producción casi un 300% en algunos productos. De media, nos han subido los costes de producción un 50% y, sin embargo, nos encontramos con unas cadenas de supermercados que se niegan a reconocer esto y pagar unos precios justos".

En este sentido, el miembro de COAG ha insistido en que no están pidiendo aumentar el precio a los consumidores con sus reivindicaciones. "Hay suficiente margen a lo largo de la cadena para que al consumidor no se le atraque y para que a los agricultores nos llegue un precio justo, que es lo que estamos reclamando en definitiva para poder vivir con una renta digna", ha detallado, pasando a exponer algunas de esas demandas, como una tarifa especial agraria para la energía eléctrica en la producción en finca, en comunidades de regantes y en centrales de manipulado.

Tarifa energética especial, revisión del IVA y de los precios y control de las importaciones, entre las demandas

El sector agrario también exigen la reducción del IVA agrícola para todos los insumos en la producción y de un 10% para todos, incluidos los servicios agrícolas. Del mismo modo piden un IVA compensatorio del 12% al 14% para los agricultores en estimación objetiva, así como medidas fiscales para la deducción de la factura de fertilizantes y plásticos no amortizables y para el aumento del porcentaje de difícil justificación en estimación directa.

Finalmente, solicitan una revisión de los precios, para ajustarlos de entrada al coste actual de las producción europeas, y acuerdos preferenciales con terceros países que impliquen un control de las importaciones y el pago de aranceles. "Esto es fundamental, porque si nos llega un precio digno y podemos pagar nuestros costes de producción esas otras medidas se pueden asumir", ha señalado Góngora. En definitiva, como han trasladado las distintas asociaciones que han participado en este manifiesto, el reconocimiento de un sector que se ha visto especialmente perjudicado por las consecuencias de la pandemia.

Este lunes tendrán una reunión con el ministro Planas, que atenderá sus peticiones. De momento, han recibido el apoyo del secretario general de UGT, Pepe Álvarez: "Hay que escuchar a los agricultores, buscarles soluciones. Ellos son los que han mantenido este país durante la pandemia y es bueno que continuemos hablando con ellos para mantener este tejido tan importante como son las explotaciones agrarias en nuestro país". En este sentido, Álvarez ha asegurado que estas reivindicaciones "no están politizadas, son justas y necesarias".

También Unai Sordo, líder de CCOO, entiende que los agricultores están "en una situación de debilidad a la hora de fijar los precios", puesto que ven "solo el 27% del coste total del producto en el mercado porque el resto se lo quedan los intermediarios". No obstante, en este sentido ha querido advertir de que se trata de "una movilización de las organizaciones empresariales, no de los trabajadores, porque estas organizaciones, por ejemplo, son contrarias a la subida del SMI". Así, ha señalado que "no es una protesta de los trabajadores del campo, es un paro patronal".