Varios centros musulmanes en Francia sufrieron ataques horas que se atribuyen a grupos radicales de extrema derecha. Un restaurante de Kebabs en Lyon quedó prácticamente destrozado tras explotar un artefacto. En Mans, otro grupo de ultraderecha, lanzó hasta tres granadas contra una mezquita. Y en el suroeste del país, los radicales atacaron y tirotearon un centro de oración musulmán. Pese a la violencia, no hay heridos en ninguno de los tres ataques.