El 'no' en el Senado argentino a la despenalización del aborto ha provocado una ola de indignación no solo en el país, sino también en todo el mundo, y especialmente en Latinoamérica. Allí hay países donde el aborto está totalmente prohibido, como El Salvador, Honduras o Nicaragua. Solo Cuba, Puerto Rico o Uruguay ya lo han legalizado.

El aborto está despenalizado también en otras naciones, pero solo en ciertos supuestos, como en Argentina: en caso de violación o si está en riesgo la vida de la madre. Existen aberrantes argumentos en contra de esa despenalización, como el que expresó Rodolfo Uturbey, senador argentino del peronista Partido Justicialista: "Hay algunos casos donde la violación no tiene esa configuración de la violencia sobre la mujer".

Sus palabras han levantado ampollas en gran parte de la sociedad argentina para quienes no acaba nada con el 'no' a la despenalización del aborto. "Esto no es una derrota. Se lo digo a las chicas que están afuera. Este es un triunfo monumental porque hemos logrado colocar en el debate nacional. ¡Ellas han logrado!", aseguró Pino Solanas, senador argentino.

Se rompe el miedo a hablar sobre un tema que ha sido, en cierto modo, silenciado. Para Amnistía Internacional, los políticos ya no podrán obviar un tema que ha entrado de lleno a formar parte de la agenda pública. "En Argentina ha ganado la despenalización social. Nos queda un camino todavía por recorrer, pero estamos convencidos de que, tarde o temprano, llegará", asegura Paola García Rey, activista de Amnistía Internacional en Argentina. Y advierten, no pararán hasta conseguirlo.