El aborto, la eutananasia y las bodas gays son un grave peligro para la paz. Así lo piensa el Papa Benedicto XVI y así lo dice en su mensaje con motivo de la Jornada Mundial de la Paz. Su Santidad sostiene que cualquier lesión contra la vida provoca daños irreparables y que la unión entre dos personas del mismo género representa un elemento desestabilizador de la paz.

El Papa defiende "el reconocimiento del derecho al uso del principio de la objeción de conciencia con respecto a leyes y medidas gubernativas que atentan contra la dignidad humana, como el aborto y la eutanasia", por parte de los ordenamientos jurídicos y la administración de la justicia.