Isidoro Álvarez, que ha muerto a los 79 años, era un hombre reservado y extremadamente discreto; son contadas sus apariciones públicas. Isidoro Álvarez fue un hombre hecho a sí mismo que supo aprovechar con especial acierto las oportunidades que se le presentaban hasta convertir a aquella pequeña empresa en la que entró en su juventud en un grupo líder en el mundo de los grandes almacenes.