El presidente del CSIC, Emilio Lora-Tamayo, ha asegurado en declaraciones a RNE con motivo del 75º aniversario del CSIC, que no considera 'fuga de cerebros' que existan investigadores formados en el CSIC que trabajen fuera de España durante un tiempo siempre y cuando tengan "la posibilidad de volver".

En su opinión, forma parte de "la movilidad" de la actividad investigadora, aunque ha reconocido que en los últimos tiempos "son más los graduados y doctores que no encuentran plaza para investigar".

No obstante, ha precisado que en los últimos tres años no más de una docena y media de investigadores del CSIC con plaza han decidido marcharse y en la mayoría de los casos "por un cheque con varias cifras".

En este sentido, Lora-Tamayo ha reclamado "tener la misma capacidad para fichar (investigadores) que se adapten a las necesidades del CSIC" y ha resaltado el trabajo que se está realizando con el Gobierno para definir "una carrera investigadora laboral, no funcionarial".

El presidente del órgano investigador ha resaltado la importancia de la inversión pública al existir "muchas líneas de investigación que ahora no tienen aplicación ni aplicabilidad", pero ha pedido a la vez un mayor esfuerzo por parte de la empresa privada.

"Es lógico pensar que el sector privado tiene que hacer un esfuerzo y no en abstracto sino en combinación con el sector público, por eso lo que estoy intentando es que cale el mensaje de que lo que tenemos que hacer es fomentar más esa colaboración", ha indicado el presidente del CSIC.

Como parte de la aportación privada, Lora-Tamayo ha mencionado la posibilidad de financiar contratos de jóvenes investigadores asociados a un centro del CSIF. "Cuesta muchísimo, pero estamos consiguiendo algunos resultados en ese sentido tan elogiables de empresas que si entienden el problema y que financian proyectos sin importarles el tema, simplemente por la brillantez de la investigación", ha expuesto.

Ha instado asimismo a aprobar la ley de mecenazgo que ha sido aparcada por el Gobierno de Mariano Rajoy por entender que sería positiva para la financiación de proyectos. "Soy un espectador ansioso por verla", ha concluido el presidente del CSIC.