Dedicamos más tiempo a hacer la compra, en concreto, un 10% más que en 2008. Un hábito que nos ha traído la crisis, porque ahora nos guiamos por el precio.“Antes comprábamos a lo loco y ahora miramos más”, es lo que opinan los consumidores.
El precio es el que manda, y buscando la mejor oferta tardamos más, incluso hacemos ruta por distintos establecimientos.El 62,7% de los consumidores españoles elige su compra por el precio según el informe realizado por Mercasa.
Y eso incrementa en un en un 10% el tiempo que dedicamos a mirar, buscar y llenar la nevera..."Antes ni me pedían el ticket, ahora me pregunta que cómo va la cuenta", asegura el dueño de un puesto de un mercado.
Hasta tres horas a la semana de media sólo para comprar alimentos, porque ahora “no vienen con idea fija, ven los precios y según les parece compran la comida”.
Además, la alta tasa de paro es otro de los factores que también influye, "antes cuando trabajaba iba a la compra una vez a la semana y ahora aprovecho que me dé el aire", asegura una parada.