El exdirector de Empresas de la CAM Daniel Gil quedará en libertad tras pagar la fianza de 400.000 euros que ayer le impuso el juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez para poder salir de la cárcel, en la que ingresó por desviar 247 millones de euros a un paraíso fiscal.

Fuentes jurídicas han informado de que el magistrado le ha impuesto como medidas cautelares la obligación de comparecer quincenalmente en los juzgados y de fijar un domicilio y la prohibición de abandonar el territorio nacional, para lo que le ha retirado el pasaporte.

Gil ingresó la noche del jueves en la cárcel madrileña de Soto del Real junto al exdirector general de CAM, Roberto López Abad, al que el juez fijó una fianza de 1,5 millones de euros que justificó en el riesgo de fuga y en su elevado patrimonio.

El juez aseguraba que pese a que López Abad tiene bienes bloqueados y embargados en la pieza principal de la CAM, por la que le impuso una fianza solidaria de 35 millones de euros, rebajada el pasado octubre a 27 millones.

Según el auto por el que el juez envió a prisión a los dos exdirectivos de la CAM, la estructura fiscal se creó con el asesoramiento de Escrivá, que defendió en varios informes la legalidad de la utilización de una sociedad pantalla -Jacksonport Corporation, domiciliada en Curazao- para canalizar los beneficios de Valfensal. Escrivá declaró ante la Guardia Civil y admitió que esa estrategia tenía como objeto "eludir las obligaciones fiscales en España".