El delantero del Real Madrid sorprendió a todos con sus cualidades como guardameta en el entrenamiento de la selección española en La Rozas. Morata ofreció un recital de auténticos paradones ante los disparos de algunos de sus compañeros. Queda claro que si alguna vez un jugador de campo debe ponerse bajo los palos, ese debe ser Álavaro Morata.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar, recoger datos estadísticos y mostrarle
publicidad relevante. Si continúa navegando, está aceptando su uso. Puede obtener más información o cambiar la
configuración en política
de cookies.