Luis Suárez fue la cara visible de la pequeña regeneración que se produjo en la plantilla del FC Barcelona en el pasado verano. Tras la debacle europea (una más) frente al Bayern de Múnich, el burofax de Leo Messi o el conocido 'Barçagate', el club se encomendó a Ronald Koeman para voltear la situación.

El técnico neerlandés, con la misión de dar un lavado de cara al equipo, apostó por los jóvenes y dejó ir a pesos pesados del vestuario como Luis Suárez o Arturo Vidal.

Mientras que el centrocampista chileno se ha coronado campeón de la Serie A con el Inter de Milán, el charrúa está cerca de lograrlo con el Atlético de Madrid.

A falta de dos jornadas para el final de LaLiga, Suárez ha pasado revista en el 'Club del Deportista', analizando su primer año en el Atleti, sus planes de futuro y cómo fue su salida de la Ciudad Condal.

"A uno le gustan los desafíos. Y venir aquí era un desafío muy grande para mí por muchas cosas. El último año recibí críticas y decían que no estaba para competir por cosas importantes, o que en el Barcelona no podía competir a alto nivel. Y eso te genera un desafío a nivel individual que hace que, al llegar al Atlético, uno quiera seguir demostrando que por algo está en la élite del fútbol, que por algo he estado muchísimos años demostrando la clase de jugador que soy. Y lo viví como un gran desafío y con muchísima ilusión. Para nada estoy arrepentido, al contrario: ilusionado y con muchas ganas de seguir demostrando", afirma el '9'.

"No me arrepiento de venir, cuando se te cierra una puerta se te abren siete más grandes. El Atlético es una gran familia, nadie se cree mejor que nadie. Hay una competitividad muy sana", añade.

A su vez, sueña con poder seguir marcando en un Metropolitano hasta la bandera: "Esperemos que llegue el momento, y sería increíble, porque sé que el hincha del Atlético es muy agradecido ante el esfuerzo que se hace. Trabajamos en el campo para recibir ese reconocimiento como grupo y para conseguir las cosas, pero a nivel individual que la gente te lo reconozca es algo muy lindo".

En clave personal, y asegurando que en un futuro le gustaría jugar en Estados Unidos, cree que su final en la selección de Uruguay será después del Mundial de Catar de 2022.

"Mi deseo es poder jugar el Mundial de Catar y ya después uno debe darse cuenta de que le llega la hora. Primero por edad y luego por la gente joven que viene detrás, que tengan la posibilidad. Llegado el momento, uno tomará la decisión apropiada, aunque asumir eso le cuesta mucho a un jugador, pero lo llevo trabajando mucho tiempo", ha zanjando Luis Suárez.