Rodolfo Baqué, abogado de Dahiana, la enfermera que cuidaba a Diego Armando Maradona, ha realizado unas declaraciones que se han convertido en un auténtico terremoto en Argentina. El abogado ha asegurado que el 10, que fue operado el 3 de noviembre de un coágulo en la cabeza, despidió a la enfermera "porque era un impedimento para consumir".

"Ella no le podía ni dar la medicación. Ella sólo hacía lo que le decía la médico y la psiquiatra", ha afirmado el representante de Dahiana, unas de las cuidadoras del exfutbolista argentino que también ha declarado ante la Fiscalía de Argentina.

"Diego era un paciente adicto, pero sólo tomaba pastillas por su prescripción psiquiátrica. Eso le aceleró el corazón. Su corazón fue sometido a un esfuerzo extra y no hubo control sobre ese esfuerzo extra. Su corazón podría haber seguido funcionando, pero fue forzado por la medicación psiquiátrica y no fue atendido por ello. Hubo una imprudencia o negligencia", continúa el abogado, en declaraciones a medios de comunicación del país.

Asimismo, en unas palabras sorprendentes, Baqué ha asegurado que Maradona "no tenía casa propia donde ir" después de que le dieran el alta en la clínica donde fue operado de la cabeza.

"Donde fue no era lo correcto. En cualquier casa de ustedes, Diego hubiera seguido vivo hoy en día. Los médicos no hicieron nada, no llamaron a nadie cuando le subió las pulsaciones. Y Los responsable son los médicos tratantes: Luque y la psiquiatra. Si Maradona quería una aspirina, pasaba por ellos", ha sentenciado.

La investigación del fallecimiento de Maradona continúa su curso y la familia ha señalado directamente a Leopoldo Luque, médico personal de 'El Pelusa'. Este martes se filtraron unas conversaciones de Whatsapp en la que Dalma, la hija mayor, pedía buscar un "clínico de cabecera" que sustituyera a Luque.