La de DaShoan y Sofia Olds parece, en principio, una emotiva historia más que se ha viralizado en las últimas semanas en Internet. La diferencia es que, en esta ocasión, su acto tenía por único objetivo hacer felices a siete hermanos que, hasta el mes de junio, estaban separados en distintas casas.
La pareja ha logrado que los siete pequeños vivan con ellos, un final tan "feliz" como el que desprende ahora su hogar, en el estado de Florida, en EEUU. "Fuimos bendecidos con una casa que era demasiado grande para nosotros", han declarado ambos.
"Es algo que teníamos que hacer", ha señalado DaShoan, el nuevo padre de familia. Él y su esposa tomaron la decisión de acoger a los niños después de ver la situación que estaban viviendo a través de un informativo local en el Día de Acción de Gracias.
A la sorpresa y alegría que muestran constantemente Necia (12 años), Eric y Erica (10), Zavian (9), Dava (8), Keyon (5) y Reggie (4) se suma también su nueva madre, cuyo cambio radical de vida, aunque inesperado, no puede haber celebrado más. "Tener hijos no estaba aún entre nuestros planes. Quizá esta era la razón", cuenta Sofía, refiriéndose a la adopción.
Los siete menores viven desde el mes de junio en casa de los Olds. Si bien la adopción aún no está reglada, pues deben cumplir un periodo de 90 días residiendo en la misma estancia sin ningún contratiempo, que los pequeños pasen a formar parte de esta gran familia se hará oficial en septiembre.