Ponen sal en la piel y presionan con un cubito de hielo. Es el nuevo reto mundial que se ha puesto de moda entre los más jóvenes. Solo, en pareja o en grupo, lo importante es compartir el vídeo en las redes sociales después de autolesionarse. Ya sea en manos, brazos, piernas e incluso en el cuerpo entero. El que más tiempo sea capaz de aguantar el dolor que provoca esta mezcla en la piel, gana el reto.

La consecuencia: graves quemaduras que se comparten como trofeos en las redes sociales. "Aguantan y encima el hielo tiene un efecto anestesino, es decir, no sabemos cuando retiremos el hielo qué daño que ha producido", explica la doctora Silvia Pérez, jefa del Departamento de Dermatología el Hospital de La Paz.

Una práctica que tiene importantes riesgos para la salud. La Guardia Civil alerta en su Twitter de los peligros que tiene sumarse a este reto. "Retración de las cicatrices que luego pueden tener pérdida de movilidad, incluso si se pasan, afectación ósea y de tendones" añade la doctora.

El objetivo es evitar casos como el de un estadounidense de 12 años. Ingresó en urgencias con quemaduras de segundo grado por aguantar la mezcla durante 20 minutos sobre su espalda. "Se forman cristales de hielo como cuando se congela el agua pero dentro de la célula, y la destruyen así", señala Pérez.

Un nuevo reto de autolesión que se suma al de la ballena azul y al del agua caliente que incluso provocaron víctimas mortales. Desafíos que se convierten en moda entre los jóvenes pero que cada vez son más peligrosos.