El exconseller de Economía Santi Vila ha depositado ya en la Audiencia Nacional los 50.000 euros de fianza que le exigió la juez Carmen Lamela para eludir la prisión, en el marco de la causa en que le investiga por rebelión, sedición y malversación. La Audiencia Nacional ya ha autorizado la puesta en libertad.

Según han informado fuentes jurídicas, el exconseller ha pagado la fianza en la cuenta de consignaciones de la Audiencia Nacional, tras haber pasado la noche en la cárcel madrileña de Estremera junto a los otros seis exconsellers para quienes la juez dictó prisión incondicional.

Pau Molins, abogado de Vila, precisó que su cliente podría haber pagado la fianza el jueves mismo por la tarde para evitar ingresar en la cárcel, pero el exconseller prefirió pasar la noche entre rejas en solidaridad con los ocho consellers destituidos que fueron encarcelados por orden judicial.

En su declaración ante la juez de la Audiencia Nacional, el exconseller de Economía, que dimitió la víspera de que el Parlament votara la independencia, se desmarcó del resto de exmiembros del Govern al comparecer con un abogado propio, el penalista Pau Molins.

Además, Vila fue el único de los investigados que accedió a contestar a todas las partes, incluida la Fiscalía, mientras que el resto de los exconsellers optaron por responder solo a las preguntas de sus defensas, representadas por los abogados Jaume Alonso-Cuevillas y Andreu Van Den Eynde.

La juez Carmen Lamela, que investiga a los miembros del Govern de la Generalitat destituidos a raíz de una querella de la Fiscalía que les acusa de rebelión o sedición y malversación, acordó dictar fianza para Santi Vila, al tener en cuenta que, cuando dimitió, "desistió voluntariamente de proseguir con el proceso soberanista".