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Asia

Cuando el tigre es el Rey

Ranthambore, un santuario para la supervivencia de esta especie

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Es posible verlos, a veces difícil, pero posible. En el Parque Nacional de Ranthambore a la población de tigres en estado salvaje se la “mima” y es un espacio ideal para ver a estos depredadores en su hábitat natural. Varias causas llevaron casi a la desaparición de esta especie en la zona. La caza furtiva, la población que se abastecía de leña en los bosques cercanos o el pastoreo hicieron que la población de tigres llegara casi a la extinción hasta que el Gobierno indio llevó a cabo una serie de medidas que han logrado su conservación. Situado en el norte de India, en Rajastán, cerca de la localidad de Sawai Madhapur. Sus orígenes están ligados a la realeza ya que antiguamente era el coto de caza de los maharajás de Jaipur hasta que en 1972 fue declarado Parque Nacional e integrado en el Proyecto Tigre. Afortunadamente en la actualidad la única caza que se práctica es la fotográfica. En un área de casi 400 kilómetros cuadrados, limitado por los ríos Chambal y Banas y con seis lagos artificiales es el hogar de gran variedad de plantas, aves, mamíferos y reptiles. Podemos inmortalizar con nuestras cámaras a los tigres deambulando tranquilamente o cuidando de sus crías. Si la suerte no nos acompaña ese día y no se dejan inmortalizar podemos consolarnos con otras especies salvajes no tan espectaculares pero si interesantes: leopardos, hienas, chacales, osos perezosos o diversas variedades de ciervo, sin dejar de lado a los reptiles que merodean por su pantano: cocodrilos, tortugas, camaleones o serpientes. Los entusiastas de las aves también podrán avistar algunas de sus más de 250 especies, entre las que destaca por su colorido el pavo real. Junto a su patrimonio natural cuenta también con un patrimonio arqueológico interesante como su Fuerte, situado en un promontorio que le permitió controlar la zona en el siglo X; alguno de los palacios rajput que hay dentro de la zona como el de Chauhan, que se eleva majestuoso sobre el bosque, o los santuarios de Mansingh y Devi. Los meses más aconsejables para visitarlo son de octubre a abril, partir de mayo la temperatura comienza a ser sofocante y va en aumento hasta el extremo de cerrar en verano con la llegada de los monzones.

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