Así es Sealand, el país más pequeño del mundo

En todo el mundo existen una serie de países muy pequeños. Luxemburgo, Andorra, Leciester… ¡Hay bastantes! Pero hay uno que sobrepasa cualquier límite. ¿De cuál hablamos? De Sealand. Si quieres visitarlo, nosotros te decimos cómo puedes hacerlo de manera más rápida y eficaz.

El que es considerado como el país más pequeño del mundo tiene un nombre: Sealand. Lejos de que todo quede ahí, tengo que decirte que está mucho más cerca de lo que imaginas. ¡Lo que lees! ¿Sabes dónde está situado este enclave tan privilegiado? ¡En Europa!. El conocido como Principado de Sealand está ubicado en el mar del Norte, concretamente a diez kilómetros de la costa de Suffolk y Essex, Inglaterra. Este peculiar país únicamente cuenta con 550 metros cuadrados. ¡Sorprendente! Por si fuera poco, también debemos conocer que su población no supera los cinco habitantes.

Y todo sabiendo que su familia real ya va por su cuarta generación. Sí, has leído perfectamente. ¡El país más pequeño del mundo tiene su propia monarquía! ¿Y por qué a pesar de ser un país tan pequeño está tan despoblado? Todo tiene un por qué. Para empezar, se encuentra en una plataforma en aguas internacionales. ¡Así es! Fue levantada nada más y nada menos que por la Armada Británica durante la Segunda Guerra Mundial, allá por 1942. Por aquel entonces se llamaba HM Fort Roughs. Se trataba de toda una fortaleza pensada para alertar y, por consiguiente, defender a Reino Unido en caso de ataque de los nazis.

Una vez terminó la Segunda Guerra Mundial, sus habitantes fueron evacuados. La última en irse fue en 1956. Este HM Fort Roughs quedó completamente abandonada, hasta que llegó Paddy Roy Bates para instalarse. Así se creó, de manera oficial, el país más pequeño del mundo.

Ahí comenzó todo. Sealand es, por tanto, el país más pequeño del mundo. Bien es cierto que ningún país lo ha reconocido oficialmente. Actualmente no se realiza ningún tipo de viaje a Sealand y tampoco se puede ir por su cuenta. ¿Y qué tienes que hacer para visitarlo? Viajar en barco y, sobre todo, pedir permiso a las autoridades pertinentes. ¡Te encantará!