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¿ERES EL MÁS DESPISTADO DE TU CLASE O DE TU OFICINA?

Seis trucos para dejar de ser el más distraído del mundo (y madrugar es uno de ellos)

Masticar chicle, escuchar música o madrugar, pueden ayudar a tu mente a abandonar ese lejano planeta en el que parece se pasa la mayor parte de las horas.

Este ya ha perdido la concentración...

Este ya ha perdido la concentración... Flickr

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Quizás no los sabías, o igual no te enteraste cuando te lo contaron, pero la falta de atención es uno  de los factores que más influyen en tu productividad y capacidad para alcanzar tus objetivos. Resumiendo radicalmente, acaba con tus sueños y te aboca al fracaso.

Además de desquiciar a todos tus amigos y conocidos porque te distraes cada vez que te están contando algo, la falta de atención hace que seas incapaz de recordar datos importantes y, lo peor, acaba convirtiéndose en una adicción y cada vez pasamos más y más de lo que ocurre a nuestro alrededor. Sigue estas sencillas técnicas, y en menos de una semana dejarás de estar en la parra.

¡Te esperan en la Tierra!

1. Prioriza tus tareas. Lo cierto es que prácticamente cualquier cosa de la vida es una distracción: familia, estudios, trabajo, amigos... La mayoría de las personas no son capaces de afrontar todos sus quehaceres diarios y mientras hacen una cosa piensan en la que han dejado a medio hacer o no han empezado, y al final no se centran en nada. Es fundamental no saturarnos y seleccionar las cosas que sí o sí debemos hacer para para alcanzar un mínimo de metas cada día. Reserva siempre una o dos actividades que te motiven y procura que nunca sean más de 10.

2. Usa cinco minutos para organizarte. Invertir apenas unos minutos al día en hacerte un esquema en papel (sí, venga, se acepta email o app de notas) te ayudará a ahorrar horas y mejorar tu creatividad. Es la mejor forma de jerarquizar tus tareas y visualizarlas, así ordenarás tu mente de un simple vistazo en lugar de tener que organizar mentalmente toda la información sobre lo que tienes o no que hacer. Después puedes improvisar, pero tendrás siempre a mano una chuleta de tu jornada.

3. Escucha música. Numerosas investigaciones a lo largo de la historia han demostrado que escuchar algo de música al día establece un estado positivo de aprendizaje, crea la atmósfera adecuada para concentrarnos, nos ayuda a desarrollar nuestro sentido de la anticipación, cambia los estados de las ondas cerebrales, mejora nuestra capacidad de atención y memoria, sirve para liberar tensiones e impulsa nuestra imaginación, inspiración y motivación. Sube el volumen y empieza a prestar atención de verdad.

Cada uno a lo suyo

4. Lo importante, a primera hora. Lo dice el refranero popular y no se equivoca, al que madruga le va fetén en la vida. Nuestra fuerza de voluntad es como un músculo que se agota a medida que pasa el día y lo mismo ocurre con nuestra capacidad para tomar decisiones importantes, que se fatiga a medida que pasan las horas. Quitarte los quehaceres aburridos o agobiantes primero, mejorará tu capacidad de atención horas después.

5. Mastica chicle. ¿A menudo te pasa que estás estudiando o trabajando y no puedes evitar darte un viaje a la nevera? Comer es una vía de escape de la monotonía y el aburrimiento, pero picotear mientras estás haciendo algo importante o estás hablando con alguien, te distrae y además te llena demasiado, lo que te deja abotargado y cansado. Como para prestar atención. ¿Solución?: mascar un chicle. Según demostró un estudio publicado en Scientific American, las personas que mascan chicle son más precisas y muestran tiempos de reacción más rápidos que los que no lo hacen. Así conseguirás mantener la atención y acabarás con esa mala costumbre de comer por hacer algo.

6. Aléjate de las tentaciones 2.0. Hoy, la mayor fuente de distracciones proviene de los dispositivos móviles. Mira a tu alrededor y verás cuántas personas están más pendientes de lo que muestra su teléfono móvil que de cualquier otro estímulo que les rodee: Facebook, WhatsApp... Pues resulta que alguien les está hablado y, como seguro también te ha pasado más de una vez, no se están enterando de nada. Tampoco tienes que aislarte, pero desconectar las tecnologías (aunque sea ponerlas en silencio) durante unas horas al día, te ayudará a mejorar tu capacidad de atención, que parece que sólo responde ante las vibraciones y avisos del móvil.

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