Descubren el origen del mal olor corporal que desprenden algunas personas

Probablemente, en más de una ocasión te haya surgido la duda de por qué cada persona huele de una determinada manera. Si bien la sudoración y el olor corporal surgen a partir del ejercicio físico, el calor, los nervios o el estrés, nunca se había llegado a determinar el verdadero origen del aroma personal.

Aunque el olor propio es un rasgo característico y primario del Homo sapiens, el conocimiento de su papel en el comportamiento y en la evolución humana es insuficiente. Ahora, gracias a un estudio publicado en la revista ‘Scientific Reports’, un grupo de científicos de la Universidad de York, Reino Unido, ha conseguido llegar a una conclusión al respecto.

Por qué tenemos olor propio

“El olor corporal está relacionado con la presencia de unas pocas especies de microbios comensales”, comienza afirmando el estudio. El posterior descubrimiento de una única enzima bacteriana limitada a los estafilococos “hominis” formadores de olores, pone el punto final a esta cuestión. Dicha proteína o enzima es considerada la última responsable del hedor que producen las axilas y por la cual algunas personas huelen mal.

Posibles aplicaciones en la sociedad

Este hallazgo, si bien a simple vista podría parecer irrelevante, es un “paso clave para entender cómo funciona el olor corporal”, asegura Michelle Rudden, coautora del estudio y doctora en la Universidad de York. Asimismo, “permitirá el desarrollo de inhibidores que impedirán la producción de este olor sin alterar el microbioma de las axilas”. Dicho de otro modo, en un futuro se podrían fabricar desodorantes, colonias o perfumes que no afectaran, a la larga, a la piel humana.

El descubrimiento de esta enzima, además, ha revelado que el olor corporal ya estaba presente en los homínidos desde mucho antes de la primera aparición del Homo sapiens. Esto podría suponer que, desde sus inicios, la evolución y comunicación humana se ha visto altamente influida por el olor corporal.

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