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¿QUIERES SER ASTRONAUTA?

Así se prepara un astronauta para ir a la ISS

Una de las profesiones más anheladas es la de astronauta. Tal vez porque han sido muy pocos los que lo han logrado, o también puede ser por el afán de curiosidad del ser humano y ver lo que hay ahí fuera. Pero como os podéis imaginar, ser astronauta no es fácil ¿Eres uno de ellos? Te contamos los requisitos

El astronauta Sergei Volkov en una misión extravehicular

El astronauta Sergei Volkov en una misión extravehicular NASA

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¿Te gustaría ser astronauta? Y en el caso de responder "sí", ¿cuáles son los motivos? Seguramente no serán el sueldo, las vistas o el que te guste llevar trajes extravagantes, pero sea cual sea, casi todos lo hemos deseado alguna vez.

Sin embargo, poco más de 500 personas de entre toda la humanidad han sido los elegidos para poder ver nuestro planeta desde ahí arriba, de los que 12 han tenido la fortuna de caminar sobre nuestro satélite siendo los seres humanos que más lejos han llegado jamás.

Y, ¿qué tiene que hacer un astronauta para ser astronauta?

Lo primero, es fácil de suponer: estudiar. La mayoría de los astronautas son ingenieros. En concreto, nuestro Pedro Duque es Ingeniero Aeroenáutico. El otro astronauta nacido en España -pero posteriormente nacionalizado estadounidense-, Miguel López Alegría, se licenció en BSc in Systems Engineering. También deberás estudiar inglés y hablarlo de manera fluída, ya que es el idioma más hablado allí arriba. El otro es el ruso.

También es fundamental tener buen físico, y con esto no nos referimos a ser guapos o guapas, sino a estar en buena forma. Las fuerzas que tendrás que soportar en el despegue son muy altas y un astronauta no puede permitirse el lujo de tener una lesión en el despegue.

Una vez arriba, tu buen estado de forma también te ayudará a superar la ausencia de fuerzas que experimentarás y para la que tu cuerpo tendrá que estar preparado. El hecho de tener una buena visión, la presión arterial en valores correctos o no tener ninguna enfermedad crónica son aspectos que también ayudan.

Además del hecho de tener una buena salud física, también es importante tener una buena salud mental: resolver problemas con rapidez, trabajar bajo presión en un ambiente pequeño o estar aislado no solo de tu familia, sino del resto de la humanidad -excepto tus compañeros de tripulación- son cosas que tendrías que realizar.

También tendrás que olvidarte de la comida tal y como la conoces: geles y alimento deshidratado serán el pan (figurado) de cada día. Hasta cambiará la forma que tienes de ir al baño. Y hay que ir con cuidado si te mareas: la sensación de estar en la Estación Espacial Internacional es la de estar en una caída libre continua.

Pero tranquilos, que la EEI también tiene cosas buenas, además de las vistas: hay wifi.

Con todo esto, si crees que cumples todas las características, te podrás inscribir en una de las convocatorias que realizan las agencias espaciales para ser astronauta y, si eres elegido, tras 5 o 6 años de entrenamiento en simuladores, podrás subir ahí arriba. Eso sí, a la última convocatoria de la ESA para seleccionar astronautas se presentaron más de 8.400 candidatos y solo seis llegaron al final del proceso. Nadie dijo que fuera fácil...

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