La princesa Leonor ha disfrutado de su primera salida nocturna con sus amigas en una discoteca de Madrid. Según se ha podido saber, la futura heredera de la Corona de España estuvo de fiesta hasta las seis de la mañana, algo que no ha gustado a su entorno que se filtrara.

La redactora jefe de Lecturas, Karmele Izaguirre , asegura en Más Vale Sábado que "todas las personas que iban a atender a Leonor en esa discoteca se vieron obligadas a firmar un contrato de confidencialidad". Y, es que, "alguien cercano a la Princesa llamó para avisar de que iba a ir a un reservado una noche con unos amigos para tomar unas copas". Sin embargo, la información se ha filtrado y esto ha provocado "un malestar muy grande en el local", pero también en el entorno de Leonor.

"¿Pero no queremos normalidad para la familia real?", se pregunta María Eugenia Yagüe, que sostiene que "una niña de esa edad no tiene por qué ir a un reservado", sino a "la pista a moverse delante de todo el mundo" porque si no, "será una desgraciada si toda su vida es a base de contratos y oscurantismos". "Es absurdo completamente", sentencia.

Una opinión que también comparte Alberto Guzmán: "¿Pero no queremos tener una familia real más cercana y próxima?".