El 1 de abril entra oficialmente en vigor el nuevo sistema eléctrico, es una medida que afecta a los 27 millones de españoles con contador de la luz. 

Por parte de las eléctricas, advierten de que ni siquiera las están preparadas para ello, por eso se les ha dado un margen de tres meses hasta 1 julio para adaptarse. En ese tiempo van a tener que devolver dinero en las próximas facturas: el dinero de más que se ha pagado tanto en este primer trimestre del año, como el que se pague de más en el segundo hasta que todo el nuevo engranaje de la factura de la luz se ponga en marcha.   

El nuevo sistema deja un panorama de facturas bastante variado. Va a haber cuatro tipos, cuatro modelos de facturas, para empezar en función del tipo de contador del que dispongamos. 

Hasta el 2018 hay margen para adquirir el nuevo contador inteligente. Con todo, si ya se dispone de ese contador adaptado al nuevo sistema, se va a facturar según el precio por hora. Esto afecta a los siete millones de personas, aproximadamente, que ya tienen el contador digital. Los precios se van a poder ver en internet el día antes en la web de 'Red Eleéctrica'.    

El siguiente modelo, es al que pueden acogerse los otros 20 millones de españoles que tienen un contador analógico. El importe del precio se obtiene haciendo una media del precio de cada día.

Quien no quiera estar pendiente ni de las horas, ni del precio diario puede acogerse a otro tipo de factura, es una especie de tarifa plan anual. Una oferta para todo el año que, quita quebraderos de cabeza pero que, por otra parte, fija un precio más alto por kilowatio hora. 

Las primeras ofertas anuales ya podrán verse en poco más de dos semanas, el 15 de abril en la web de la Comisión Nacional del Mercado la Competencia.   

Y hay un cuarto modelo, poco perfilado porque básicamente se trata de un acuerdo personal entre la eléctrica y el consumidor.