Un shock séptico provocado por una bacteria y derivado de la varicela que padecía, es la causa de la muerte de la pequeña Anne a falta de confirmación de la autopsia. Un virus, que aunque no suele ser grave, es muy contagioso, se trasmite de persona a persona, por vía respiratoria o contacto directo.

La consejería de Salud de Burgos ha extremado las precauciones en el centro escolar de la pequeña. Entre las medidas, se ha suministrado un tratamiento antibiótico de 10 días para 24 personas que han estado en contacto con la niña. Las familias comienzan poco a poco a estar más tranquilas.

Las sobreinfecciones bacterianas, como parece ser el caso de Anne, son una de las causas de complicaciones más comunes derivadas de la varicela.

La vacuna, según los expertos, es una de las mejores formas de prevenir la enfermedad. Pero desde el 1 de enero de 2014 se ha retrasasdo la edad fijada para ponerla hasta los 12 años.