Los problemas de abastecimiento se centran en la última dosis de la vacuna, que se debe administrar a los seis años (anteriormente, se inyectan dosis a los cuatro, seis y 18 meses), según ha explicado en un comunicado el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
La falta de vacunas se debe a que los laboratorios de las fabrican no pueden disponer "de los elementos necesarios" para fabricar el antígeno de la tos ferina, esencial para elaborar la vacuna trivalente dTpa.
En caso de que el desabastecimiento se alargue demasiado, se podría administrar una vacuna contra el tétanos y la difteria, sin el componente de la tos ferina, aunque los niños de seis años están bien inmunizados si han recibido correctamente las dosis anteriores.
"En estos momentos es difícil estimar el tiempo necesario para resolver la situación, que podría prolongarse", destaca el comunicado, que concreta que el problema también afecta a la vacuna pentavalente (difteria, tétanos, tos ferina acelular, H.influenzae tipo b y polio inactivada).