El 3 de abril de 2003 la doctora Noelia de Mingo mataba con un cuchillo de grandes dimensiones a tres personas en la fundación Jiménez Díaz, en Madrid. Una de ellas es una compañera. La novia de un joven que se interpuso entre Noelia De Mingo y otra persona a la que quería apuñalar.

En la sentencia del juicio se concluye que Noelia de Mingo sufre Esquizofrenia Pranaoide y es condenada a pasar un máximo de 25 años en el centro psiquiátrico penitenciario de Alicante. Ahora los forenses de ese centro dicen que la enfermedad de Noelia de Mingo está controlada y que debe quedar en libertad. Algo a lo que se oponen los familiares de sus víctimas.

Los forenses proponen que al igual que durante los permisos de los que ha disfrutado Noelia de Mingo, sea su madre quien vigile que se medica adecuadamente.

Esto provoca desconfianza a los familiares de las víctimas ya que creen que debería estar controlada por personal sanitario en todo momento. Será la audiencia provincial de Madrid la que decida si finalmente hace caso a los informes y deja a Noelia de Mingo en libertad.