Destrozados han quedado los dos coches del último accidente en Madrid. Han chocado frontalmente y aún no se saben las causas. Un hombre de 53 años ha muerto en el sitio y dos están heridos. Poco antes, en la provincia de Sevilla otros cuatro viajeros fallecían en una aparatosa colisión múltiple de tres turismos que ha dejado una persona más en estado grave.
Con éstas son ya 688 personas las que se han dejado la vida en las carreteras españolas en lo que va de año, la cuarta parte por pisar demasiado el acelerador. Por este motivo, la DGT despliega a partir de este lunes controles que serán en vías convencionales, es decir, desde calles a carreteras comarcales o nacionales, donde los conductores más se saltan el límite. María, perteneciente a la Dirección General de Tráfico asegura que “hasta un 36% de los conductores excede la velocidad permitida".
Además de para aquellos que superen la velocidad, también habrá castigos para quienes les pillen avisando de los controles con sanciones de hasta 80 euros, según un portavoz de la Guardia Civil de Tráfico. Más de 750 radares fijos y móviles vigilarán las carreteras de aquí al final del verano. El pasado fin de semana acabó con trece muertos aunque no hubo grandes atascos ni problemas.
El viernes fue el peor día con siete fallecidos en tres accidentes, cinco de ellos sólo en un brutal choque entre un coche y un camión en Castellón. Los bomberos cuentan: “Nos encontramos un amasijo de hierros". La investigación apunta a que el conductor del turismo se quedó dormido aunque los pasajeros sí llevaban el cinturón de seguridad.
