El detenido como presunto autor de la muerte de su pareja en la localidad alicantina de Torremanzanas no tenía antecedentes por violencia de género, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana y de la Guardia Civil. El hombre fue detenido por la Guardia Civil en la Vila Joiosa tras acudir a un hospital y confesar que había matado a su pareja, a la que supuestamente había descuartizado, según han informado fuentes próximas a la investigación.

La causa la lleva el juzgado de instrucción número uno de San Vicente del Raspeig en funciones de guardia, que se inhibirá en las próximas horas a favor del número cuatro, que es el competente en casos de violencia sobre la mujer. Según ha informado el TSJCV, la jueza ha confirmado que no existen antecedentes de violencia entre la pareja. Tampoco constan denuncias previas ante la Guardia Civil por parte de la víctima.

El detenido, que según el TSJCV se encuentra ingresado en un hospital, aún no ha sido puesto a disposición judicial. De acuerdo con la Guardia Civil, no se prevé que declare en el juzgado hasta el jueves.

Ante este nuevo crimen de violencia de género, distintas entidades han convocado diferentes concentraciones de repulsa. La Plataforma Feminista de Alicante ha convocado una concentración en la Plaza de la Montañeta de la capital alicantina, al igual que se hará en Torremanzanas. Por su parte, la Delegación de Gobierno también ha convocado una concentración en la sede de Valencia y en la subdelegación de Alicante.

Tras una pelea, el hombre, supuestamente, la mató y abrió en canal el cadáver antes de cortar varios de los miembros, y a continuación trató de incendiar la casa de campo con los restos mortales en el interior prendiendo gran parte de los enseres que había.

A partir de ese momento, el hombre permaneció durante casi 24 horas "perdido", sin que se conociera el crimen, hasta que el martes contactó con su padre, que vive en Benidorm, y éste le dijo que acudiera al hospital de Villajoyosa para que le curaran las heridas leves que tenía. Una vez allí, los responsables del centro sanitario dieron aviso a la Guardia Civil ante la cual M.R.S. se declaró culpable de los hechos.

El hombre, natural de Benidorm, se presentó en el hospital de la Vila Joiosa con heridas e informó de que había matado a su pareja. La Guardia Civil se personó después en su domicilio, una vivienda aislada de la localidad de Torremanzanas parcialmente calcinada, y allí encontró "restos" de la mujer, de origen rumano y 24 años.

Aunque el relato del arrestado y que todo hace indicar que se trata, efectivamente, de un episodio de violencia machista, la Guardia Civil trata de confirmar ahora que el detenido y su víctima mantenían una relación estable.