'Defiende tu casa, defiende tu pueblo, defiéndete'. Es el lema de cientos de vecinos de Alcolea del Pinar para denunciar la situación que viven desde hace cinco años. Desde que cerró el cuartel de la Guardia Civil, ellos son los únicos que defienden el pueblo. Aquí estaban destinados 40 guardias civiles y ahora, su estado es de total abandono.

Antes, los agentes les ayudan en apenas unos minutos, mientras que ahora tardan casi dos horas en llegar cuando se produce algún robo. "Me vine a vivir aquí porque era una zona tranquila y ahora tenemos miedo", "cualquier día puede haber una desgracia. Hay mucha gente que tiene las escopetas ya cargadas" denuncian los vecinos.

Están atemorizados y la situación parece que no va a cambiar porque el cuartel va a ser subastado: "No somos ciudadanos de segunda ni de tercera, tenemos los mismos derechos que cualquier otro ciudadano de capital". Una situación similar viven en Boqueixón, A Coruña. Su cuartel ya está bajo mínimos y solo abre por la mañana.

El 57,6% de los acuartelamientos no cuentan ni con 10 agentes, y el 84% no llegan ni a los 20 guardias. Desde el sindicato de Guardias Civiles denuncian que no se cubren las plazas: "Existen dos motivos claros (para el cierre de cuarteles): la falta de reposición de los agentes que se jubilan y la huida de los guardias civiles a las grandes poblaciones" denuncia Pedro José Carmona, responsable de RRSS de AUGC.

Aseguran que agrupar en grandes poblaciones más de 50 efectivos permitiría tener más agentes patrullando por las calles. Fuentes del Ministerio de Interior afirman que se está trabajando en un Plan de Redistribución Territorial para solucionar este problema.