Rajoy ha querido respaldar hoy a Wert. Silencioso, pero presente. Sin embargo, la oposición sabe que Wert es un Ministro no demasiado popular internamente, y por lo tanto, vulnerable.
La portavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, ha definido a Wert como "el ministro al que todos quieren arrinconar", mientras que la diputada socialista Carmen Montón, ha señalado que "nadie le quiere como ministro, ni fuera ni dentro del PP". Wert ha optado por la ironía, ante la risa de Báñez: "Gracias por todas sus amables consideraciones hacia mi persona".
A la salida del hemiciclo, Wert se ha ido de tapadillo, discretamente, en contra de lo que suele ser habitual en él. Ha aprovechado que había otro ministro, en esta caso Montoro, con problemas.
Ni en el PP ni en el Gobierno gustan las formas de Wert. Ni esa capacidad que tiene, de sopetón, para abrir melones. Y es que tan pronto como lo abrió, ante la falta de apoyo del PP, lo tuvo que cerrar: "Sí se va a considerar la revisión de la nota mínima para acceder a becas". Es casi imposible pensar que Wert abre esos melones sin el consentimiento de Rajoy. Aunque si luego resulta que está verde, te lo tienes que comer tú.