Así dialogan la guardia civil española y la policía gibraltereña. "Esto es un banco español y lo tengo aquí porque me da la gana", gritaba un agente. Que sepamos, es el último encontronazo. Se produjo el martes pasado.
Discuten por la propiedad del agua, un conflicto que dura ya casi 300 años y que los habitantes del Campo de Gibraltar sufren en su día a día. Cuanto más se agrava el conflicto, más se alargan las colas.
En esta ocasión, la Guardia Civil protegía a un buque del Instituto español de Oceanografía. Desde hace más de una década, tres veces al año, recoge muestras de agua en una zona, según ellos, en el límite de Gibraltar gibraltereño.
El martes pasado, mientras trabajaban, recibieron la visita de hasta 4 barcos de Gibraltar. Rodearon el buque y con un megáfono les pidieron que se marcharan. Ellos llamaron a la Guardia Civil. Cuando llegaron saltó el conflicto. Finalmente, la Guardia Civil, consiguió que se marcharan.
Gibraltar habla de acto deplorable de agresión contra la soberanía británica. España niega la incursión en aguas de Gibraltar y dice que Reino Unido obstaculiza la labor española. Ambos embajadores han sido llamados a consultas. Federico Trillo acumula 4 llamadas en 23 meses y la Guardia CIvil denuncia que nunca lleguen a acuerdos. Y así, el tú más y el "la culpa es tuya" se traslada casí a diario al origen del conflicto.