Los que gobiernan en Cataluña interpretan con ironía los mensajes de Rajoy: “Mejor tomárselo con humor, ¿no?” dice Francesc Homs, portavoz del Govern.

Según la Generalitat el PP ha ido a Barcelona con un discurso amenazante y ellos han aguantado el envite: “Contrariamente a los análisis apocalípticos de la división que hay en Cataluña, dicen ellos, y de la tensión que general el debate soberanista, han estado dos días en Barcelona y no ha habido incidentes” comenta Homs.

Incidentes ninguno pero Rajoy sí dejó un recado a los independentistas: “Mientras yo sea presidente del gobierno la consulta no se va a celebrar y España no se va a fragmentar”.

Tras este discurso, los socialistas catalanes ya le han adjudicado un seudónimo: “Se ha convertido ‘míster no’, es decir, una persona que todo lo convierte en negativo y que no es capaz de explicar cuál es su propuesta para resolver el problema catalán” dice Maurici Lucena, portavoz del PSC en el Parlament.

Y Esquerra ha empezado a cantar victoria: “El único proyecto que tiene para nosotros es la sumisión, es una clara muestra del inicio de la derrota: o ponen buenos argumentos o perderán seguro” afirma Oriol Amorós, diputado de ERC en el Parlament. Porque, insisten, la consulta se celebrará legalmente.