La Comunidad de Madrid ha sido una de las regiones españolas más afectadas por la epidemia de coronavirus que sigue asolando a todo el territorio nacional. Tanto por el número de personas contagiadas (más de 72.000 hasta la fecha), como por el de profesionales sanitarios que, en plena lucha contra esta crisis sanitaria, han acabado también infectados (más de 52.500 confirmados en todo el país).

Todo ello, unido a las condiciones de precariedad en las que han estado trabajando desde el inicio de la pandemia, especialmente en las residencias, ha llevado al colectivo de enfermeros y enfermeras de la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) a remitir un comunicado de protesta al Gobierno de la Comunidad de Madrid, así como a distintos consejeros, directores y gerentes relacionados con la sanidad madrileña.

"La gestión del personal sanitario por una consejería no sanitaria supone, como se ha evidenciado en esta pandemia, un enlentecimiento en la asistencia, que las medidas y protocolos hayan llegado tarde, que el personal sanitario no haya tenido las mismas garantías que el de salud y que decisiones importantes hayan influido de manera extraordinaria en la calidad de vida y muerte de las personas que cuidamos", reza el escrito enviado por el colectivo.

En el mismo documento han aprovechado para explicar la función que desempeñan, que va desde las vacunaciones de los residentes a la realización de pruebas PCR, sondajes vesicales y rectales, cirugías menores, curas crónicas, tumorales y derivadas de procesos quirúrgicos y la educación sanitaria, entre otras muchas labores que ellos mismos han expuesto en un documento al que ha tenido acceso laSexta.

Duele que nuestros políticos y nuestra Consejería no nos hayan preguntado siquiera qué ha fallado"

Colectivo de Enfermería de la AMAS

"Durante esta pandemia hemos estado en las trincheras", han recordado, señalando el dolor que les ha supuesto la "evidencia" de que no se les ha tenido en cuenta: "A los que hemos estado donde la guerra era muy dura y donde había más muertos nos consideraban profesionales de segunda”. Y han añadido: "Duele que nuestros políticos y nuestra Consejería no nos haya preguntado siquiera qué ha fallado, y realicen los protocolos personas de Sanidad que no han manejado la situación in situ".

Por ello, han finalizado el comunicado reclamando que el personal sanitario se adscriba a la Consejería de Sanidad con los mismos derechos que sus compañeros sanitarios, que se dote de medios y recursos adecuados a los centros que ellos gestionan y que, a su vez, se garanticen mecanismos estables de gestión. Porque, según han insistido, esta situación ha dificultado aún más el trabajo en la AMAS.

En sus propias palabras, la "falta de reconocimiento" hacia su labor se debe a una "falta de conocimiento de las funciones" que desempeñan, a lo que "se suman las pésimas condiciones laborales". Esto ha provocado, según han denunciado, "que en esta pandemia dos o tres enfermeras hayan tenido que cuidar y tratar a 464 residentes en un turno". Y han insistido: "Somos sanitarias igual de preparadas que nuestras compañeras de SERMAS y Atención Primaria".