El PSC del candidato Salvador Illa ha ganado las elecciones autonómicas del 14 de febrero en Cataluña. Ha sumado 651.027 votos en la región (23,02 del total) y obtiene así 32 escaños en el Parlament. Son 16 asientos más de los que consiguió en las elecciones de 2017.

El segundo partido más votado ha sido el ERC, que ha logrado el 21,31% del voto total escrutado y también 33 escaños en la Cámara. Por detrás se sitúa Junts Per Catalunya, tras sumar el 20,06% de las papeletas, que le garantizan 32 escaños. Las siguientes formaciones por número de asientos en el hemiciclo son Vox, con 11 escaños y el 7,69% de los votos y la CUP, con 9 escaños y el 6,68% de las votaciones.

Por debajo en el escrutinio, se colocan En Comú Podem, Ciudadanos y el PP, con 8, 6 y 3 escaños en el Parlament, respectivamente.

Por provincias, ERC ha ganado en Tarragona y JxCAT en Girona y en Lleida, mientras que en Barcelona la formación que ha recibido más votos ha sido el PSC.

Con estos resultados, Pere Aragonès podría convertirse en el nuevo president de la Generalitat, aunque necesitaría el apoyo de JxCAT y de la CUP para alcanzar la mayoría absoluta en la Cámara, que está en 68 escaños. También podría darse un pacto entre el PSC, ERC y En Comú Podem, que de unirse formarían un gobierno con 74 escaños en el Parlament.

Además, la participación en las elecciones catalanas 2021 ha sido del 53,54%, un porcentaje mucho menor de los electores que fueron a votar en los comicios de 2017, los de mayor movilización en la historia de la región.

Resultados elecciones catalanas 2017

El 21 de diciembre de 2017 se celebraron las últimas elecciones a la presidencia de la Generalitat, en un contexto de alta tensión política en la comunidad. El referéndum ilegal sobre la secesión de Cataluña del 1 de octubre y la declaración unilateral de independencia anunciada tres semanas después llevaron al entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a aplicar el artículo 155 de la Constitución y a tomar el control de las instituciones autonómicas. También destituyó a Carles Puigdemont, que huyó a Bélgica, y convocó elecciones en la región.

Ciudadanos se llevó la victoria en estos comicios con el 25,37% de los votos, que le permitieron sumar 36 escaños en el Parlament. Por circunscripciones, el partido encabezado por Inés Arrimadas ganó en Barcelona y Tarragona, mientras que en Girona y Lleida el triunfo fue para la segunda fuerza en la Cámara, JxCat, que alcanzó 34 escaños bajo el liderazgo de Puigdemont. En tercera posición quedó ERC, con 32 asientos parlamentarios y Oriol Junqueras como candidato.

Ocho puntos por debajo en el porcentaje de votos totales se situó el PSC. Los socialistas llevaron a Miquel Iceta como número uno en sus listas y consiguieron el 13,88% de las papeletas y 17 escaños. Los siguientes partidos con más apoyos por parte de los electores catalanes quedaron a una distancia considerable de los demás. Estos eran: CatComú-Podem (Xavier García Domènech, 8 escaños), el PP (Xavier García Albiol, 4 escaños) y la CUP (Carles Riera, 4 escaños).

A pesar de que Ciudadanos había ganado en estos comicios, Arrimadas no pudo convertirse en presidenta del Govern porque no reunió los apoyos suficientes para una posible investidura. Por su parte, Puigdemont sí logró asociarse con ERC y convencer a la CUP para que se abstuviera en las votaciones. Sin embargo, la justicia no le permitió volver a dirigir la Generalitat por los delitos de los que se le acusaba tras el 1-O y por encontrarse fugado en Bélgica. Finalmente, el 14 de mayo de 2018 el Parlament eligió en segunda votación a Quim Torra, también de JxCat. El ahora expresident sumó 66 votos a favor, 65 en contra y 4 abstenciones, de modo que se acabó consumando el proyecto de un gobierno independentista en Cataluña.