El independentismo adapta su discurso de cara a las elecciones y ya separados, el PDeCAT cuestiona la utilidad de que ERC reconozca que no estaban preparados para la república, aunque mientras los hacen, también lo admiten. "¿De qué sirve ahora decir que no lo deberíamos haber hecho, que no estábamos preparados? ¿Quién es quién no sabía que no teníamos ejército, ni control de fronteras, ni acceso al mercado económico? Toda Cataluña sabíamos eso", asegura Lluís Puig, exconseller de Cultura.
Aunque no vayan juntos, los independentistas sí quieren acordar puntos para hacer un frente republicano común y para eso Marta Rovira ha viajado hasta Bruselas para verse con Puigdemont y los consellers. Dicen que el objetivo sigue siendo la república pero apuntan que costara más. "Un proyecto como la independencia requiere seguro un trayecto más largo que pedirá esfuerzos más grandes de los que se puede imaginar mucha gente", apunta Toni Comín, exconseller de Salud.
Será más lento, dicen, porque no esperaban tanta "represión" por parte del Estado. "No habíamos creído nunca que un estado democrático como el Estado español estuviera dispuesto a ejercer la violencia de una manera superlativa", señala Joan Tardà, diputado de ERC en el Congreso.
Para Catalunya en Comú, el Govern debería haber reconocido antes que la independencia no era posible y Xavier Doménech pide que ahora sean claros: "Que en estas elecciones se practique la máxima honestidad y la máxima concreción sobre cuáles son las propuestas que hacen los partidos".