El expresidente de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, junto a otros cuatro exdirectivos, está al borde del banquillo. La razón son los casi 19 millones de euros que se embolsaron en indemnizaciones meses antes de dejar el cargo y que Novacaixagalicia fuese rescatada.
Sin embargo, el propio Fernández Gayoso lo negó hasta el Congreso de los Diputados, "me parece que es justo que diga aquí que no he cobrado ni un euro nunca".
En total son nueve los imputados que tiene esta entidad. Pero no es ni mucho menos la única. En palabras de Andrés Hergoz, abogado de la acusación particular de UPyD, "hay muchísimas cajas sin investigación y hay riesgo de prescripción de los delitos".
Hasta 22 exconsejeros y directivos de Caja Segovia también están siendo investigados por prejubilaciones millonarias, aprobadas por un consejo 'agasajado' con viajes camuflados como 'jornadas de formación', entre ellos, al Carnaval de Venecia.
Bankia cuenta con 32 imputados y el juez Andreu investiga su salida a Bolsa junto con las preferentes de Caja Madrid planificadas por Miguel Blesa.
En lo que respecta a Caixa Catalunya, sus directivos se subieron el sueldo cuando estaba al borde de la quiebra.
LA JUSTICIA SE ENFRENTA A LOS BANCOS