María Dolores de Cospedal ha destacado este domingo el "fracaso" que ha cosechado en las urnas Artur Mas, que planteó estas elecciones como un "plebiscito" para conseguir una "mayoría absoluta" que "a todas luces no se ha cumplido" porque ha perdido 12 escaños. Tras asegurar que la situación para aquellos que pretendían "una Cataluña fuera de España" ha "empeorado", ha descartado cualquier pacto con el candidato de CiU, que "no puede estar más radicalizado".
"La convocatoria electoral desde el punto de vista de lo que Mas quería conseguir ha sido un fracaso", ha enfatizado Cospedal en una rueda de prensa en la sede nacional del PP, donde ha recalcado que el "otro gran fracaso de la noche" ha sido el de los socialistas catalanes, que han perdido ocho diputados.
La 'número dos' del PP ha recordado que el PSOE también perdió en Andalucía -aunque siga gobernando en esta comunidad- y en Galicia, y ahora los socialistas catalanes con Pere Navarro como candidato han logrado un resultado "más que malo". "Que un partido en la oposición, que en momentos como los que nos encontramos, tenga en Cataluña una pérdida de apoyo tan importante, también es muy significativo", ha aseverado.
En su análisis, ha indicado que ERC sube y lo ha achacado a que, dentro de la campaña "muy radical" que ha hecho CiU, ciudadanos que "en otras épocas han votado a CiU se han ido a votar a ERC". Según ha recordado, eso también ha pasado en tiempos pasados donde "la deriva soberanista de CiU" ha dado lugar a "un incremento" de los republicanos.
La secretaria general de los 'populares' ha destacado que el PP de Cataluña que lidera Alicia Sánchez-Camacho ha logrado el "mejor resultado de su historia" y ha subrayado que se trata de un "magnífico resultado" en un momento en que el Gobierno de España está adoptado medidas "impopulares" para salir de la crisis.
"A pesar de eso, el PP no solo conserva sus escaños sino que aumenta su apoyo", ha enfatizado, al tiempo que ha recordado que en otros grandes países europeos los gobiernos que han tomado medidas "difíciles", se han visto "sancionados o castigados" en las elecciones municipales o regionales, algo que "no está pasando en España con el Partido Popular".
Además, ha negado cualquier posibilidad de pacto con Artur Mas porque "no puede estar más radicalizado" y se presentó con un programa electoral que apuesta por la "separación" de Cataluña. A su entender, los resultados demuestran que "historias de separatismo y división lo único que hacen es empequeñecer a aquel que las plantea" y "aislar a aquellos que quieren separase todavía más".
"El PP tiene algo bien claro: que nada ni nadie está por encima de la ley y de nuestro ordenamiento jurídico y no vamos a poder realizar ningún pacto con el señor Mas ni con CiU", ha afirmado al ser preguntada si el Partido Popular está dispuesto a hacer algún gesto para impedir que CiU se arroje a los brazos de ERC para gobernar.
En este punto, ha insistido en que el papel de otros partidos para "evitar" la radicalidad del candidato de CiU "es imposible" porque "el señor Mas no puede estar más radicalizado". Además, ha destacado que ahora los partidos "soberanistas" tendrán 74 escaños en el Parlamento catalán frente a los 76 con los que contaban hasta ahora, por lo que ha "empeorado" la situación de los que quieren una "Cataluña fuera de España".
Tras indicar que el "derecho a decidir los catalanes lo han ejercido hoy", ha afirmado rotunda que los resultados de estas elecciones ponen de manifiesto que los catalanes "lo que quieren es un gobierno que gobierne y les ayude a salir de la crisis". "Es algo que no ha hecho porque prefirió convocar elecciones", ha resaltado.
Al ser preguntada si considera que Mas debería presentar su dimisión, ha dicho que es una cuestión que corresponde a CiU, si bien ha destacado los "plebiscitos se ganan o se pierden". "No sé lo que le pedirá su partido. En CiU tendrán que hacer las valoraciones oportunas, no me corresponde a mi decirlo".
Finalmente, la secretaria general de los 'populares' ha puesto en valor la alta participación en los comicios, lo que, en su opinión, pone de manifiesto la "gran validez democrática" de unas elecciones cuando los ciudadanos "creen que se juega algo importante", así como "el gran carácter democrático que tiene" la sociedad catalana.