Según ha informado la policía catalana en un comunicado, los hechos ocurrieron poco antes de las nueve de la noche en el distrito de Sant Martí de Barcelona, cuando un niño cruzó corriendo la calle, pasando por delante de un vehículo de los Mossos d'Esquadra que circulaba a ritmo de patrullaje preventivo.
El chico fue trasladado a un centro hospitalario en ambulancia y ahora permanece estable en observación, según los Mossos. Según la versión de la policía catalana, los agentes no pudieron evitar el accidente, que ahora está siendo investigando por la Guardia Urbana de Barcelona.
Los agentes salieron del vehículo para asistir al menor y pidieron una ambulancia y el apoyo de más patrullas policiales. Según el comunicado de los Mossos, cuando los agentes estaban atendiendo al chico, un grupo de personas les rodeó y algunos de ellos increparon a los policías y empujaron a uno de los agentes, a quien le rompieron la camisa y le robaron el móvil y la porra.
Con la llegada de los refuerzos policiales se pudo establecer un cordón policial que permitió, según los Mossos, garantizar la seguridad del menor, evitando así que la gente se abalanzara. No obstante, algunas de las personas congregadas siguió increpando a los policías.
Según los Mossos d'Esquadra, una agente resultó herida leve durante este incidente. Además, cuando llegó la ambulancia el menor fue trasladado a un centro hospitalario y la situación se fue normalizando. Los Mossos d'Esquadra, que también han abierto una investigación por los hechos que se desencadenaron tras el atropello, han identificado ya a dos personas como supuestas autoras de las agresiones a los agentes.