Los inmigrantes que deseen solicitar subsidios económicos en el Reino Unido serán sometidos a partir de ahora a un test que incluirá cien nuevas preguntas y tendrán que rendir cuentas sobre su nivel de inglés, según ha anunciado el Gobierno británico.

El Ejecutivo de David Cameron reveló que se empezará a aplicar un examen "más sólido", en el que habrá incluidas más de 100 preguntas extra frente a las que había hasta ahora en el llamado test de residencia, en los centros de búsqueda de empleo en Gales, Inglaterra y Escocia. La medida entrará a funcionar antes de que se levanten el próximo uno de enero las restricciones de búlgaros y rumanos al mercado laboral británico.

Para superar la prueba habitual de residencia, los inmigrantes que quieran reclamar estos subsidios deberán responder preguntas "diseñadas de manera individual" y proporcionar respuestas más detalladas. Según el Gobierno, esas personas tendrán que contar cuáles han sido los esfuerzos que han realizado antes de llegar al Reino Unido para encontrar trabajo en una medida destinada "a proteger la integridad del sistema de subsidios".

El test asegurará que "solo los inmigrantes que tiene el derecho legal a estar en el Reino Unido y planean contribuir a este país pueden realizar una solicitud de beneficios", según dijo el ministro de Trabajo y Pensiones, Iain Duncan Smith.

"Por primera vez, los inmigrantes serán interrogados sobre los esfuerzos que han realizado para encontrar trabajo antes de llegar al Reino Unido y si sus habilidades con el inglés serán una barrera para encontrar empleo", apuntó en un comunicado el ministerio de Trabajo y Pensiones (DWP). Entre esos subsidios económicos se incluyen la ayuda a la vivienda, el impuesto sobre la propiedad, el subsidio de desempleo y jubilación.

Smith consideró que los inmigrantes deberían contribuir a la economía y no "deberían sentirse atraídos por el sistema de subsidios". "Es muy importante que tengamos reglas estrictas para proteger la integridad de nuestro sistema de subsidios", afirmó el ministro.

El test, que será supervisado por un "sistema informático inteligente", ayudará a crear un sistema justo que "no permitirá a la gente venir al país a aprovecharse", agregó.